" Voy a llevarme todo por delante para verte sonreír " -

jueves, 18 de agosto de 2011

Agosto 18 del 2011 , un dìa mas sin ti
Me mentí todo este tiempo. Me tape los oídos y cerre mis ojos. No quería verte ir. Sabía que lo harías. Sabía que era inevitable. Sabía que me dolería mucho ver como te desatabas de mi, de todo lo que nos unía. Me deje caer con la excusa de no saber aún sabiendo. Me dejé caer porque pensé que aparecerías para rescatarme, para evitar que choque con el suelo. Al principio pensaba, de hecho estaba segura de que había aparecido en tu vida para salvarte, que había sido una cuestión casual, totalmente del momento. Mientras escuchaba ayer el silencio de la noche, en soledad entre las paredes de mi casa, pude sentir el susurro del destino hablándome de cómo nunca debimos encontrarnos, pensando en que en verdad fuiste vos quien me salvó. Y mientras escribía una de las tantas cartas que te dediqué desde que te conocí, planeando en secreto un día mandartelas, levanté mi vista del papel en blanco que sólo se encontraba con tu nombre al comienzo y los dos puntos que le daban comienzo a otro llanto en vano para darme cuenta de que se esquivocaba, todo este tiempo, el destino se esquivocó. Y algo dentro mío volvió a encenderse, como un Fenix renaciendo de las cenizas, mi amor por vos me hizo sonreír entre làgrimas. Supe entonces que lo nuestro era mucho más que destino, lo nuestro era piel, alma y corazón. Lo nuestro era conexión, dolor, amor y vida. Nada más y nada menos que vida. Apreté con fuerza la hoja en mi puño, y comencé con una nueva hoja, a un nuevo destinatario. Y decía más o menos así: 

Querido Destino: 
Se que esto es difícil de explicar, puede que sin importar lo que diga, hagas lo posible e incluso lo imposible para colocar piedras en mi camino pero no temas, mi perseverancia y mi convicción me han enseñado a tener paciencia porque como dicen,
lo mejor, se hace esperar. Y se que será complicado, soy consciente de que lo mío con este hombre no está dicho, ni escrito, ni arreglado por quien sabe quien pero algo dentro mío me dice que es él, que él es lo mejor para mi, en su forma, a su manera, por esas cosas que él odia de si mismo y yo amo de él. No puedes pedirme que le olvide, que lo deje de lado, que no le hable, que no le escriba en espera de una respuesta. No me pidas cosas que no puedo hacer. Existe una sóla forma en que pueda dejarlo ir y es que él me pida por elección exclusivamente propia que le deje en paz, que desaparezca de su vida por completo. Y entonces lo haré. Juro que lo haré pero hasta que eso suceda, lamento comunicarte que no te daré el gusto de salir corriendo. No otra vez. Esta vez viene para quedarme en su vida. Para quedarme y dar lo mejor de mi. Para quedarme a su lado y poder verle sonreír, para secarle las làgrimas con besos. Dejame curarlo, deja que me salve, que me lleve consigo donde quiera, que me lleve si quiere al fin del mundo o al infierno mismo, yo sólo quiero su compañía, quiero mirar a mi lado y encontrarme con sus ojos. Dejame ser felíz.Sin más me despido de ud, esperando que el mensaje cambie el rumbo de las líneas que un día marcó en mi mano, en el mapa de mi vida.



1 comentario:

  1. Me encanta, me encanta, me encanta! Vaya decisión para describirle al destino. Me encantó la entrada. Un abrazo.

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